El recurso de “atacar al mensajero” es además de un pobre intento por defender lo indefendible, hasta un recurso psicológico -según Freud- que se utiliza como “defensa para enfrentar lo insoportable”.
En todo caso, es una maniobra para evadir las necesarias explicaciones. Claro que se puede utilizar para responder una investigación periodística, no en una investigación judicial.
A ese frágil recurso apeló hoy el titular de Salud, Ariel De La Rosa, cuando se refirió a la denuncia periodística de NOTICIAUNO que reveló que el ministro designó “ad honorem” a altos funcionarios de su ministerio para luego beneficiarlos con contratos millonarios que son verdaderos “sueldos encubiertos”, para que realicen tareas que están incluidas en las funciones públicas que deberían desempeñar, en una clara maniobra que permite “burlar los topes salariales vigentes para funcionarios públicos”, además de existir la sospecha de que algunos de esos funcionarios percibieron indebidamente beneficios previsionales (a la par de los honorarios derivados de esos contratos) por estar -mal- encuadrados como contratados de Obra aunque, en los hechos, cumplen tareas y tienen atribuciones de funcionarios (caso en el cual no podrían cobrar una jubilación a la par) (ver acá los contratos y la denuncia).
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Lejos de aclarar nada sobre los contratos por dos millones de pesos que involucran a tres de sus funcionarios, De La Rosa objetó en cambio “la forma de comunicar la situación”.
En declaraciones a Radio La Voz de Paraná, De La Rosa comenzó diciendo que "hay formas y formas de comunicar”, y en ese marco cuestionó que la investigación periodística revelara el monto total de las contrataciones, cada una de las cuales oscila entre 250 mil y 420 mil pesos. “Cuando se da a conocer un contrato por el total del año, hay que dividirlo por 12”, dijo, en una confusa cátedra de aritmética.
Como si 12 x 35.000 no fuera lo mismo que 420.000.
Luego, en un intento por defenderse, De La Rosa relativizó las contrataciones, aunque no hizo más que confirmar la denuncia de NOTICIAUNO. Dijo que los contratos con los que benefició a sus funcionarios “son los sueldos de gente que presta servicios para esta gestión de salud, y se trata de gente que ha prestado ayuda sustancial para este Ministerio”.
Es precisamente esa maniobra la que fue denunciada por NOTICIAUNO y ahora es confirmada por el Ministro de Salud.
El Ministro designó ad honorem a funcionarios para luego contratarlos –vía contratos de obra- por cifras muy elevadas, que en verdad son “sueldos encubiertos”. Maniobra que permite evadir el tope salarial dispuesto para los funcionarios públicos y en algunos casos, hasta los aportes previsionales a la Caja de Jubilaciones.
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De La Rosa también guardó silencio respecto al pedido de informes de la Caja de Jubilaciones de la Provincia, que le pidió explicaciones sobre algunos de esos contratos, por existir sospechas sobre probables incompatibilidades con la ley provincial de Jubilaciones.
En la entrevista radial, el ministro continuó defendiendo los contratos de sus funcionarios: “Estos contratos salieron previa autorización y visación de todos los órganos de control", agregó, sin mencionar por ejemplo, que quienes precisamente “autorizaron y visaron” los contratos en cuestión fueron los propios beneficiarios de esos contratos: el Director de Asuntos Jurídicos, Víctor Hugo Berta, y la Directora de Contrataciones de su ministerio, Luisa Ester Berruezo) quienes se “autoasignaron” contratos por cientos de miles de pesos (monto total sin dividir por 12), previo estampar sus firmas (“autorizar y visar” en palabras del Ministro) primero como funcionarios y luego como contratados.
Después de cuestionar la “forma de comunicar” las irregularidades, De La Rosa volvió a confirmar las irregularidades reveladas por la investigación de NOTICIAUNO (y las sospechas de la Caja de Jubilaciones de la Provincia), al afirmar: "Pero estos tres funcionarios de los que se habla, son inobjetables técnicamente".
No es la idoneidad técnica de los funcionarios contratados la que está en tela de juicio.
La que está sospechada por irregular es LA MANIOBRA ejecutada por el Ministro (y por dos de sus funcionarios involucrados) que permitió a quienes son funcionarios públicos (los tres, según lo admitió el Ministro) aparecer como contratados de obra, para cobrar sueldos “encubiertos” más elevados que los permitidos por el tope salarial vigente (según lo admitió el Ministro), aunque con facultades de funcionarios que le permiten, por ejemplo, autocontratarse.
En su intento por chicanear la investigación periodística, De la Rosa la embarró: el ministro confirmó hoy que los contratos de obra por cientos de miles de pesos que cobran sus “tres funcionarios” son “los sueldos de gente que presta servicios para esta gestión de salud”.
Justamente lo que denunció NOTICIAUNO.
Un escándalo.
Fuente: Noticiauno
