El gobierno de Mauricio Macri impulsa un proyecto de ley de reforma del Código Penal que pretende poner "mano dura" a la inseguridad . Por eso, quien arroje proyectiles contra otra persona en una marcha recibirá hasta 2 años de prisión. Si la víctima es un policía, la pena será de 3 años.
De aprobarse la iniciativa, se castigará con hasta 3 años de prisión a quien entorpezca la marcha de un medio de transporte público o privado.
El anteproyecto plantea, entre otras cuestiones, elevar las penas del narcotráfico y, si bien la tenencia de drogas no se penará si no trasciende del ámbito privado, quienes siembren, cultiven o guarden plantas tendrán que podría pasar entre 4 a 15 años en prisión. Los que produzcan o vendan drogas, tendrían penas de 5 a 20 años.
Además, las personas reincidentes no tendrán libertad condicional y, si se trató de delitos graves, deberán cumplir penas de 35 a 40 años como mínimo.
Sumado a eso, con el proyecto se duplicarán las penas por soborno y entorpecimiento ilícito y se castigará con prisión el financiamiento ilegal de los partidos en las elecciones. Se crearán, también, nuevos tipos penales como la asociación ilícita terrorista, que tendrá penas de 5 a 20 años, y nuevos delitos como: genocido, desaparición forzada de personas, cyberacoso, clonación humana, delitos genérticos, acoso laboral, delitos informáticos, pornovenganza y trabajo esclavo.
Desde que se sancionó el Código Penal en 1921, hubo 900 "leyes parche" y se hicieron 17 comisiones reformadoras. Una de estas 17 comisiones es la que enviará este anteproyecto de ley al Presidente, quien dijo que lo enviará al Congreso nacional.
