La polémica en torno a los sueldos de diputados y senadores nacionales se desató por la suba de un 47 por ciento más respecto de lo que cobraban en enero.
Según publicó el diario La Nación, los legisladores nacionales cobraron este mes un promedio de 85.000 pesos de bolsillo.
Si se tienen en cuenta los ingresos no remunerativos por fuera de la dieta y los gastos de representación, esto es, el cobro por desarraigo (que perciben sólo los legisladores del interior) y los pasajes (canjeables por dinero en efectivo si no se usan), el monto puede llegar hasta los 141.000 pesos mensuales de bolsillo.
De acuerdo a lo que informó el matutino, los aumentos se aplicaron por una decisión conjunta entre los presidentes de ambas cámaras, Gabriela Michetti (Senado) y Emilio Monzó (Diputados).
Desde el Frente para la Victoria, el jefe de la bancada en Diputados, Héctor Recalde, dijo que va a “analizar si corresponde” el aumento y opinó que los legisladores que “se quejan” deben “donar el excedente al (Hospital) Garrahan”.
Por el Frente de Izquierda, la diputada Myriam Bregman denunció que es “un escándalo” que un legislador pueda “llegar a percibir 141.000 pesos de bolsillo” cuando hay trabajadores que “ganan menos de diez mil pesos por mes y el Gobierno y las patronales se niegan a la reapertura de las paritarias para recuperar el salario perdido por el ajuste”.
También, la legisladora recordó: “Desde el primer día que llegamos al Congreso con mi compañero Nicolás del Caño presentamos un proyecto para que los diputados cobren el equivalente a un sueldo docente”. “Eso hacemos los diputados del PTS/FIT, y además destinamos el excedente al apoyo a las luchas de los trabajadores y causas populares”, afirmó mediante un comunicado emitido este lunes.
En tanto, Nicolás Del Caño dijo al sitio Parlamentario que “mientras la mitad de la población vive con menos de diez mil pesos mensuales y los gobiernos provinciales y distintas corporaciones patronales salen a coro a negar un bono para los trabajadores y los jubilados, la casta política no hace más que aumentar sus privilegios”.
Y añadió: “No sorprende: los que se aumentan las dietas son los mismos que vienen votando todas las leyes que benefician a los grandes grupos económicos y que tienen funcionando el Congreso a espaldas de las necesidades del pueblo trabajador”.
José Ignacio De Mendiguren, del Frente Renovador, manifestó en declaraciones radiales que “sorprende e indigna” enterarse del aumento de las dietas y consideró que el porcentaje es “muy exagerado”.
Por otra parte, el referente del bloque Justicialista Diego Bossio justificó el incremento en las dietas. En diálogo con Radio Vorterix, el diputado sostuvo que en la Cámara baja hay un alto “nivel de trabajo”.
“Entiendo el enojo de ciertos sectores en un año que fue muy difícil y hubo muchas dificultades económicas”, señaló, al tiempo que confesó: “Me sorprendí con el nivel de trabajo que hay en la Cámara de Diputados”.
El extitular de la ANSES aseguró este lunes que en la tarea legislativa es “muy ardua y rigurosa”. “Es una tarea muy ardua la que se hace”, remarcó y consideró que correspondían “actualizaciones de cosas que estaban rezagadas”.
Para Bossio, la tarea del legislador “muchas veces implica un esfuerzo muy grande” y mucho más para “los legisladores del interior”. Reconoció que “hay tareas muchísimo más duras, como las que hacen muchísimos argentinos”, pero se quejó que “hay una subestimación permanente hacia los diputados”.
“Hay sectores del Poder Ejecutivo que tienen ingresos más altos y ni hablar del Poder Judicial”, enfatizó y pidió dar una “discusión más profunda” acerca de lo que debe ganar un funcionario público.
Los diputados nacionales entrerrianos Juan Manuel Huss y Lautaro Gervasoni (FPV) prefirieron esperar al mes que viene para opinar, después de analizar el aumento en detalle.
Gervasoni afirmó: “Sé que iba a haber un aumento, pero como decían algunos medios, de 70%, no. Me parece una locura, que esas cifras que se manejan no son las reales. Si es del 70% como dicen, es totalmente desmesurado”.
Por su parte, Huss aseguró que desde el área que se encarga de las liquidaciones de los diputados no le manifestaron que habría alguna modificación. Asimismo, reconoció que el recibo modelo que figura en la página web de la Cámara de Diputados de la Nación está desactualizado, ya que corresponde a julio y el último tramo de aumento lo recibieron en agosto, que completó un total del 31%.
Ese porcentaje está atado al acuerdo que alcanzó la Asociación Personal Legislativo -APL-, gremio que nuclea a los empleados del Poder Legislativo. Según explicó Huss, “una dieta de un legislador representa un 20% más que el sueldo de mayor jerarquía dentro de la Cámara”. A esa dieta, que rondaría los 100 mil pesos, se le deben restar los descuentos pero sumar lo percibido en concepto de gastos de representación, desarraigo y pasajes, que daría un total cercano a los “85 mil de bolsillo”, agregó.
Fuente: Noticiauno