Atilio Benedetti (Cambiemos) arrancó la campaña este fin de semana en busca de votos que le permitan achicar la diferencia que obtuvo el candidato peronista Gustavo Bordet en las PASO del 14 de abril. El PJ le ganó a Cambiemos por más de 165 mil votos, con el 58 por ciento de los sufragios, un resultado que para los analistas es irreversible.
Pero Benedetti insistirá, aunque apele a irrealidades para lograrlo.
Primero intentará “provincializar” la elección del 9 de junio. Una tarea compleja. Es que Benedetti, durante la campaña de las primarias, hasta viajó a Buenos Aires, Capital Federal y Mendoza para conseguir apoyo a su candidatura de los más encumbrados referentes nacionales de Cambiemos.
Videos, actos, spots y fotografías con la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, con la fundadora de Cambiemos y diputada nacional, Elisa Carrió, con el presidente Mauricio Macri, con el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, con la vicepresidenta Gabriela Michetti, y hasta con el presidente de la UCR nacional y gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, entre otros, lo demuestran. Benedetti nacionalizó la elección de Entre Ríos y el resultado fue contundente.
Tras la derrota, el macrista Benedetti, que perdió en las PASO más del 50 por ciento de los votos que obtuvo en 2017 cuando fue candidato a legislador nacional, busca revertir el resultado, incluso a costa de negar lo que todos padecen.
Tal es así que, en un comunicado, Benedetti afirmó: “Entre Ríos tiene todas las posibilidades de salir del estancamiento, de ser una provincia competitiva y de empezar a despegar, pero tiene un Gobierno que ha demostrado no ser capaz de generar empleo privado”, lanzó. Y agregó: “No me vengan a hablar de que hay crisis a nivel nacional”.
Sin palabras.
Recesión, pobreza, inflación, devaluación, tarifas impagables, falta de créditos, endeudamiento internacional, y la pérdida del trabajo de más de un millón de argentinos en los últimos 12 meses, son datos de la realidad que no discuten ni siquiera los funcionarios nacionales de Cambiemos. Para eso el presidente Mauricio Macri lanzó una convocatoria a diferentes sectores de la oposición, gremios, instituciones y empresarios con la intención de encauzar una situación económica que se ha desmadrado por las políticas encaradas desde el gobierno de la alianza PRO-UCR-CC.
Pero claramente, Benedetti no reparó en esas nimiedades, y arrancó la “campaña de verdad”, como dijo tras la derrota del 14 de abril.
Es evidente que negando la realidad que azota a los bolsillos de millones de argentinos (y entrerrianos), e intentando “provincializar la elección” haciéndose el distraído con todos los referentes nacionales que buscó para que lo apoyen- que ahora pretende ocultar-, la campaña “DE VERDAD”, arrancó mal.
Fuente: Noticiauno