Todo comenzó este sábado, cuando el presidente Mauricio Macri -que vino a Entre Ríos a inaugurar un Puente Carretero en la Ruta 19- lanzó una feroz crítica al exgobernador Sergio Urribarri, en la cara y hasta con la anuencia del gobernador Gustavo Bordet.
En tono empático, Macri le dijo a Bordet que “lo comprendía”, porque así como él recibió un país quebrado (sic), “vos Gustavo recibiste la provincia en la misma situación”.
Esa frase, sumada a la pasividad del gobernador Bordet que asintió con un leve movimiento de cabeza de arriba hacia abajo que se observa claramente en el video, enfureció a Sergio Urribarri, que en la red social Facebook, hizo su descargo disparando a diestra y siniestra.
Urribarri no solo le pegó a Macri. También puso en duda los eventuales resultados de la gestión Bordet. Y de paso le tiró a Busti con munición gruesa.
A Macri le aclaró que la obra que inauguraba junto a Bordet se ejecutó durante su mandato. De paso le dijo al Presidente que formaba parte del “coro de resentidos devenidos en pseudo fiscales públicos berretas que se repite sin analizar” esto de la “pesada herencia”.
Después lo involucró a Bordet. Urribarri dijo que “descarta de plano” que “el gobernador Bordet con su apoyo (el de Macri) pudiera algún día superar lo que hicimos con Cristina en esta provincia”.
Acto seguido, atendió a su padrino político. Urribarri lanzó un sablazo a Jorge Busti por el nivel de endeudamiento con el que recibió la Provincia en 2007.
“Aprovecho para aclararle Presidente, ya que últimamente no tengo mucho aire en los medios, que yo no endeudé a la provincia”, comenzó expresando Urribarri en su descargo 2.0.
“Cuando la entregué (a la provincia, a Bordet) la deuda representaba en proporción la mitad de lo que era cuando la recibí” (de Busti).
Urribarri precisó que Busti le entregó la Provincia con una deuda que representaba “el 52% del Presupuesto”, mientras que a Bordet, su ahijado político, Urribarri le entregó una Provincia cuya deuda era “cinco veces menor que en el 2003”, cuando gobernaba Busti.
La crítica presidencial, que desde el gobierno provincial no se atrevieron a responder en primera persona, se metió de lleno en la interna del PJ.
El silencio de Gustavo Bordet tras la acusación de Macri hacia Urribarri, sumado a la factura que Sergio Urribarri le pasó a Jorge Busti por la herencia del endeudamiento, desnuda el verdadero terreno en el que se teje la unidad del Peronismo.
Y vuelve a mostrar al PJ como un ring donde los padres del dedo, que impulsan –ahora- la unidad, son quienes -nuevamente- la ponen en riesgo.
¿Qué dirá Busti ahora?
Fuente: Noticiauno
