El recuento extraoficial de los mandatos de las distintas seccionales departamentales de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER) indica que la tercera propuesta salarial presentada por el gobierno provincial al Frente Sindical Docente sería rechazada este viernes por el Congreso de maestros estatales que sesionará en la ciudad de Concepción del Uruguay.
En el mismo sentido se pronunciarían los docentes privados (SADOP) y técnicos (AMET).
En el último encuentro que mantuvieron dirigentes gremiales y autoridades provinciales, el aumento ofrecido se elevó al 23,5 por ciento (5,5 puntos porcentuales más que la propuesta inicial del 18%), además de una cláusula gatillo por la cual la administración Bordet se compromete a reconocer la diferencia derivada de la inflación que supere eventualmente el incremento pactado.
Del 23,5% propuesto, un seis por ciento ya fue liquidado en el mes de marzo, cuatro puntos se liquidarían a partir del 1 de abril, 7,5 por ciento en el mes de julio y seis en el mes de octubre.
En las últimas horas, el secretario general del gremio provincial, Fabián Peccín, dijo que el incremento ofrecido por la Provincia “no recupera el poder adquisitivo perdido el año pasado ni la proyección inflacionaria de este año”.
A eso se suma el malestar generado por “la persistencia de errores en las liquidaciones de este mes”, que, según indicó una fuente confiable a NOTICIAUNO, fue definitorio del “mandato de rechazo” que llevarán al Congreso.
Claudio Puntel, secretario general de la seccional Paraná, expresó que hay disconformidad “con la propuesta oficial, en particular con la extensión del pago en cuatro tramos, el último de los cuales se cobraría recién en octubre”. En sintonía con la conducción central afirmó que “los cinco puntos que mejoró el gobierno en la última oferta no alcanzan a cubrir el desfasaje inflacionario del año pasado”.
De este modo, el panorama sigue siendo incierto en torno al conflicto educativo provincial que, a diferencia de lo que ocurría hasta el año pasado, tiene un actor menos: el gobierno nacional.
Por el incumplimiento de la paritaria nacional docente por parte del gobierno de Mauricio Macri, este año quedaron fuera de la paritaria docente los montos fijos del salario que paga en negro el Estado nacional: el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid), que en el caso de un maestro de grado representa 1.210 pesos, y el código de “material didáctico” que la Nación paga por mes y representan hoy 110 pesos a cada maestro por cada cargo.
El Ministro de Economía, Hugo Ballay, señaló en la última reunión con los gremios que “el máximo esfuerzo” de la Provincia plasmado en la última oferta, intenta compensar la falta de actualización de los montos que paga la Nación.
El argumento “técnico” del gobierno nacional es que la pauta de incremento para este año ya quedó establecida en el acta firmada el año pasado con los sindicatos nacionales, que dice que “… a partir de esta paritaria, el salario docente no podrá ser menor a un veinte por ciento por encima del salario mínimo vital y móvil”, lo que en la práctica implica que el piso mínimo salarial docente se ajusta automáticamente.
Los sindicatos sostienen que esa cláusula marca un “piso” salarial y no su “techo”, y que por la negativa del gobierno de convocar a la Paritaria Nacional, los gobiernos provinciales terminan otorgando aumentos de acuerdo a sus pocas posibilidades fiscales, sin una pauta de referencia de la ayuda nacional para las provincias más complicadas.
En este escenario, con un gobierno nacional ausente de la discusión, todo el peso de la negociación recae en las provincias y las expone, según tengan o no recursos para afrontar la negociación, a una menor o mayor dependencia del Gobierno nacional.
Fuente: Noticiauno