El exministro de Salud Ariel De La Rosa, actualmente imputado y procesado por delitos de coacción agravada –en carácter de autor y coautor- contra la directora de un hospital (Noelia Trossero del hospital Colonia de Salud Mental de Diamante), arrancó “un impulsivo raid afiliatorio” por hospitales y centros de salud de la provincia. Los profesionales con quienes se contactó la semana pasada afirman que la intención del exministro de "alistarlos a UPCN" es "una actitud de provocación" y "una forma más que clara de ratificar su actuación y la del gremio", aunque estén al borde de un juicio oral.
A pesar de la grave situación que enfrenta en la Justicia penal por haber amenazado y coaccionado junto a la cúpula del gremio UPCN a una directora de un hospital –y a otros directores según causas que están en marcha en la Justicia- De La Rosa recorre sin sonrojarse, y en nombre del gremio señalado por la Justicia por haber cometido los delitos de coacción agravada, desobediencia judicial y amenazas, hospitales y centros de salud, promocionando el desprestigiado sindicato, intentando -infructuosamente- nuevas afiliaciones.
“Ahora busca a médicos y directores”, confió uno de los profesionales que no sale de su asombro tras la “visita” y la “sugerencia gremial” del exministro.
“Vino con la ficha de afiliación de UPCN”, relató uno de los directores que recuerda “los atropellos que vivieron la mayoría de sus colegas”, en una gestión marcada por los aprietes, el destrato y las amenazas. No sólo de parte de los dirigentes gremiales que obraban como “brazo ejecutor” del exfuncionario, sino del propio “doctor De La Rosa” que pareció olvidar el status de “colegas” de la mayoría de los directores a quienes destrató y presionó para que cedieran a los propósitos sindicales.
De La Rosa, hoy un confeso promotor gremial hospitalario, asumió “un rol denigrante”, según las fuentes consultadas por NOTICIAUNO.
“Ojalá nos hubiera atendido cuando era ministro y le reclamábamos por el estado del hospital, con la misma dedicación que nos pide ahora que lo atendamos para explicarnos las bondades de afiliarse a UPCN. No tiene cara”, sentenció una médica indignada, tras recordar “los desmanejos del gremio durante el año y medio que duró su gestión”.
“No podíamos creer el motivo para el que pidió una reunión. Solicitó entrevista e ingresó con una ficha de afiliación en la mano, tratando de convencernos de los beneficios de afiliarse” a UPCN, reiteró.
“Tal vez el exministro está trabajando con (el diputado) Allende en la Cámara (de Diputados), y ésta sea la tarea que le encomendó su jefe”. “Nosotros pensábamos que venía para transferir su cargo a este hospital, pero es desvergonzado que viniera para afiliarnos”, relataron empleados de un centro de Salud de Paraná que fueron testigos de la intención del exministro de “reclutar” sin suerte a su directora.
El infructuoso raid gremial de De La Rosa evidencia un alto grado de menosprecio, no solo por su delicada situación judicial, sino fundamentalmente por el descalabro -material e institucional- en el que entregaron la Salud Pública.
Los profesionales con quienes se contactó la semana pasada consideran que, en el actual contexto, "el llamado telefónico a médicos y directores y la intención de alistarlos a UPCN" es "una actitud de provocación" aunque "ahora se cuiden modales", y es "una forma más que clara de ratificar su actuación y la del gremio" que lo sostuvo políticamente, conducta por la que están a punto de enfrentar un juicio oral, acusados de graves delitos, que no son excarcelables.
Su desvergüenza corrobora claramente que, en la escala de convicciones del extitular de la cartera sanitaria y en la de UPCN, la Salud Pública estaba –y sigue estando- por debajo del interés gremial y personal.
Fuente: Noticiauno