Con la eliminación de la alícuota del impuesto a los ingresos brutos (que en la provincia es del 6%) que deben pagar los bancos por los intereses que cobran mensualmente de cada crédito hipotecario, se espera un impacto positivo en el monto de las cuotas.
La iniciativa, impulsada por el Gobierno Nacional, fue sancionada ya en otras provincias que aprobaron modificaciones o están discutiendo el tema en sus legislaturas.
De sancionarse en el Senado el texto aprobado en Diputados, en Entre Ríos también quedarán exentas del tributo las cuotas hipotecarias.
El texto que aprobó la Cámara de Diputados surgió de unificar dos iniciativas, una del radical José Artusi y la otra del presidente del cuerpo, Sergio Urribarri. El proyecto que bajó al recinto agregó un artículo que solicita a los municipios “una reducción en la Tasa de Comercio que cobran a los servicios bancarios para este tipo de operaciones”.
Tras la reunión de Comisión que mantuvieron este martes los legisladores con el ministro de Economía de la provincia, Hugo Ballay, para consensuar la redacción del proyecto, el funcionario dijo que la eliminación del impuesto “no tendría un alto impacto para las cuentas públicas, aunque en principio es difícil de evaluar, porque es una medida que está recién iniciando”. Asimismo Ballay recordó que “el gobernador Gustavo Bordet comparte el objetivo de esta ley”, aunque “con los resguardos necesarios como para que esa reducción de impuestos se vuelque en una reducción de cuotas, que el beneficiario sea el tomador de créditos y no que quede en las instituciones financieras”.
El peligro: ¿Quién controlará a los bancos?
Después de que la Ciudad de Buenos Aires y la legislatura bonaerense sancionaran iniciativas similares a la que se aprobó este martes en la Cámara de Diputados de Entre Ríos, algunos bancos salieron a anunciar la rebaja en la tasa de interés para los nuevos préstamos hipotecarios, pero hay también instituciones financieras –hasta el propio Banco Nación- que a pesar de la reducción del impuesto, no tocaron sus tasas.
Es decir que, a pesar del impacto negativo en la recaudación provincial, la rebaja de Ingresos Brutos no benefició directamente a los tomadores de préstamos, sino a los bancos que, a pesar de tener menores costos (menos impuestos), no mejoraron los precios finales de sus productos.
Fuente: Noticiauno
