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31/07/2018

Rossi: La absolución del juez, cargada de polémica

El juez de Ejecución Penal de Gualeguaychú, Carlos Rossi, había otorgado la libertad condicional a Sebastián Wagner, quien meses después violó y asesinó a Micaela García. El jury decidió por cuatro a tres que había cumplido con lo que la ley le exige.


Absolvieron a Carlos Rossi, el juez que liberó a Sebastián Wagner, femicida de Micaela García. El magistrado enfrentó un jury por mal desempeño y falta de idoneidad, y este lunes fue absuelto y podrá retomar sus funciones.

En abril del año pasado, Rossi le otorgó la libertad condicional a Wagner, quien poco después violó y mató a la joven. El fallo desató una polémica entre quienes consideran que el magistrado cumplió con la ley y quienes lo responsabilizan por el crimen de la joven.

Por una votación de 4 a 3 el jury resolvió que Rossi podrá volver a ejercer sus tareas como juez de ejecución penal de Gualeguaychú. Los jueces Germán Carlomagno, Daniel Carubia y Miguel Giorgio; y el abogado Roberto Beherán votaron a favor de la absolución de Rossi, mientras que el senador Daniel Olano, la diputada Esther González y el abogado Jorge Campos lo hicieron por la destitución. El Procurador General de Entre Ríos, Jorge Amilcar García no acusó a Rossi en los alegatos de clausura. Los padres de Micaela no estuvieron presentes en la audiencia de ayer y calificaron al proceso como “un circo”. Los fundamentos del fallo se conocerán recién el 29 de agosto.

La abogada e integrante del Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos (Cepoc), Claudia Cesaroni, afirmó que la decisión del jurado le parecía correcta. “Este juez le otorgó la libertad condicional a una persona que cumplia todos los requisitos para obtenerla. Tenía los tiempos ya cumplidos y, si no hubiera salido por libertad condicional, lo hacía hace quince días por el fin de la condena”, le dijo Cesaroni a Página12. Además, opinó que realizarle un jury a Rossi es “atribuirle responsabilidades y culpabilizarlo de un delito horrendo” como lo es el femicidio de Micaela García.

Luego del crimen de la joven, la Justicia recibió siete pedidos para destituir a Rossi por haberle otorgado la libertad condicional a Wagner, quien cumplía una condena por violación. A pesar de haber recibido tres informes que lo desaconsejaban, el juez decidió que Wagner estaba “posicionado favorablemente” para quedar en libertad. “Quiero que entiendan que los jueces de ejecución de penas no tenemos una bola de cristal para saber qué es lo que va a acontecer tras una decisión que tomamos. Si la tuviéramos, no la tomaríamos”, se defendió Rossi en una de las audiencias.

En su defensa ante el Jurado, Rossi señaló que si se tienen en cuenta los parámetros técnicos, ninguna de las siete denuncias en su contra atacaban la resolución de la liberación de Wagner, sino que se centraban en la perspectiva de género. Lo que se le recriminó al magistrado fue no tener en cuenta las posibles conductas del imputado en caso de ser liberado. El juez también aseguró que fue “una víctima de los medios” y que fue demonizado por la prensa. 

Cesaroni opinó que un juez no puede prever que un recluso al que se beneficia con libertad condicional va a cometer un delito. Para la abogada, un fallo contra Rossi hubiera sido disciplinador porque “el mensaje que se daría es que no se debe conceder libertad condicional ni salidas transitorias, que son derechos que los presos tienen”. “Los jueces tienen cada vez más temor de cumplir con la ley porque no pueden prever si las personas cometerán algún delito y, si lo hacen, se lo querrán imputar a ellos”, señaló Cesaroni y aseguró que, de esta manera se condena a la totalidad de los presos a la “cárcel eterna” por “los delitos que cometen algunas personas”. “La solución no es transformar la cárcel en una tumba”, afirmó.

Por su parte, De Ponti sostuvo que, si bien es cierto que Rossi no podía adivinar que Wagner iba a cometer un nuevo crimen después de ser liberado, sí tenía “elementos para ser responsable a la hora de decidir liberar a una persona”. “Nunca quedaron claros cuales eran los argumentos por los cuales se decidió liberar a Wagner, que tenía más de un antecedente de delitos de género”, le dijo la diputada a este medio. Si bien aseguró que no quiere “favorecer una posición a favor del punitivismo”, señaló que “las personas que cometen violaciones suelen ser reincidentes”. “La Justicia es responsable, no sólo el juez Rossi, es el sistema”, acusó.

Respecto a los informes del Servicio Penitenciario, Cesaroni puntualizó que son “un elemento más”. “Hay algunos estudios que se le hacen a las personas que pueden salir en libertad condicional, pero el juez no está obligado a seguir esos informes. Las pericias son aportes técnicos, pero el que decide es el juez, que es el que evalúa un conjunto de elementos”, dijo. “Un caso como el de Micaela es horrendo, no hay forma de reparar eso, pero lo que se está analizando en este caso es si el juez puede seguir trabajando”. 

Para la abogada de Cepoc, “no se le puede imputar a Rossi lo que una persona que estaba en condiciones de tener libertad condicional hizo una vez que tuvo esa libertad”. “Esta persona, si no salía en ese momento, iba a salir ahora. Si volvía a cometer un delito, ¿a quién se le reclama?”, señaló.

Sebastián Wagner había sido condenado en 2012 por abuso sexual a nueve años de prisión. Estuvo en la cárcel hasta que Rossi lo liberó en 2016. El 1 de abril del año siguiente, Wagner violó y asesinó a Micaela García.

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