Tras haber dictado una retroceso de fase en Gualeguaychú por el incremento desmedido de casos confirmados de Covid 19, el municipio gobernado por el intendente Martín Piaggio enfrenta una situación de tensión con los comerciantes de su ciudad que cuestionan las medidas de aislamiento.
Adolfo Solari, presidente del Centro de Defensa Comercial, advirtió que “si continúa la medida, se van a revelar”.
En declaraciones a radio Máxima de Gualeguaychú, Solari sostuvo que “desde el municipio nos dicen que entienden la difícil situación del comercio pero que no pueden hacer nada, debido a la situación muy complicada desde lo sanitario, pero nosotros no estamos de acuerdo porque los comercios no contagian y con este tipo de decisiones generan un enorme problema para la ciudad”.
“Hay que entender que cerrar una semana significa recortar el 25% de los ingresos de un comercio en el mes, lo que es de un enorme impacto”, detalló el referente comercial.
Solari agregó: “no estamos pidiendo subsidios, solamente reclamamos que nos dejen trabajar, porque frente a esta situación tremenda que vivimos, no vamos a poder pagar la totalidad de los sueldos y también cumplir con las diferentes obligaciones”.
Respecto a la posibilidad de extender la medida de cierre, el titular del Centro de Defensa Comercial de Gualeguaychú expresó que “el decreto dice que es hasta el lunes el cierre obligatorio, pero a nosotros no nos aseguran que solamente que será por una semana, por lo que se podría extender”. Ante ese panorama de extensión de las medidas restrictivas, Solari adelantó que “la mayoría de los comerciantes ya decidió que va abrir las puertas más allá de lo que pueda resolver el gobierno municipal”.
Críticas a Piaggio
El comerciante habló de la falta de empatía del gobierno local: “El municipio no se solidarizó con el sector comercial en ningún momento, porque no hubo condonación de impuestos, más allá que estuviéramos cerrados. Nos dicen que cerremos, pero nos siguen cobrando como si durante este tiempo hubiéramos tenido actividad plena”.
Finalmente, Solari remarcó que “la situación no es crítica es desesperante, donde el comerciante ya no sabe qué hacer para sobrevivir. En la primera etapa se consumieron los stock, luego se endeudaron y ahora ya no tienen salida”.