Durante la segunda jornada de Audiencias Públicas por el aumento del gas, la Usina del Arte en el barrio porteño de La Boca estuvo prácticamente vacía.
Abrieron la jornada sindicalistas y legisladores que expusieron sus argumentos a favor y en contra del incremento que dispuso el Gobierno.
Para el dirigente de izquierda Claudio Lozano, quien fue el encargado de abrir la segunda jornada de debate, “una audiencia pública supone un gobierno abierto a escuchar, pero llegamos acá con un gobierno que intentó eludir la audiencia y que tiene una propuesta de aumento prácticamente cerrada“.
A su turno, el diputado nacional por el Frente de Izquierda Néstor Pitrola pidió “la anulación inmediata del tarifazo” y aseveró: “Este aumento es a libro cerrado y a favor de las compañías que llevaron al fracaso de este sistema“.
El ex ministro de Economía del kirchnerismo Axel Kicillof argumentó en contra del incremento: “Está aplicando un tarifazo cuando el bolsillo de los argentinos ya sufrió la caída de más del 10 por ciento del salario“. Para el diputado el nuevo esquema tarifario que presentó el Ejecutivo nacional tras el fallo adverso de la Corte Suprema “es peor al que teníamos antes y en dólares”, por lo que concluyó que “el Gobierno no quiere volver al autoabastecimiento y ha dado vuelta todo el sistema energético”.
En su exposición, el senador Fernando “Pino” Solanas aseguró que el Gobierno no ha cumplido con el fallo del máximo tribunal: “Esta audiencia, lejos de ser generosa, es autoritaria y no ha cumplido con las exigencias de la Corte Suprema de proporcionar toda la información necesaria y, sobre todo, del costo de la generación de gas que es secretismo de Estado y que va en contra de la Ley de Información Pública”, enfatizó. “Jamás padecimos algo como esto: perdimos la capacidad de autoabastecimiento y ahora se pretende castigar, en un marco de emergencia social, a los trabajadores y al pueblo argentino”, añadió.
El presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, defendió el esquema de incremento en la tarifa de gas propuesto por el Gobierno, al advertir que el sistema actual “no es justo”. “Implica una tarifa que para el año que viene, para el 56 por ciento, va a ser de 107 pesos de promedio; para el 31 por ciento, va a ser de 371 pesos; y para el 13 por ciento, que son los de más alto consumo, va a ser de 953 pesos”, aseguró. Durante su exposición, que duró menos de los 5 minutos estipulados, el senador afirmó que “el 30 por ciento de los subsidios se aplica a los sectores más ricos y solo el 10 por ciento a los más pobres y eso no es justo“.
El diputado nacional por Cambiemos Eduardo Amadeo defendió el incremento en la tarifa de gas, al advertir que estamos discutiendo un componente central del país que queremos” ya que “la estructura de tarifas que hoy se propone reformar ha sido un ejemplo de inequidad y de agresión a variables clave de nuestro desarrollo económico y social y que las decisiones que se tomen deben contemplar estas dimensiones”.
Ausencias
De los 12 intendentes del Conurbano que se habían anotado para hablar sólo se acercaron hasta la Usina del arte de La Boca, el de San Martín, Gabriel Katopodis, de Merlo, Gustavo Menéndez y de Esteban Echeverría, Fernando Gray.
Y mientras la audiencia continuaba desarrollándose, la intendente de La Matanza, Verónica Magario, sacó un comunicado que supuestamente acompañaron la mayoría de los intendentes peronistas del Conurbano, repudiando el aumento. Muchos de los firmantes estaban anotados para exponer y ni siquiera se presentaron.
Todo el bloque de gobernadores de la Patagonia, menos La Pampa, se ve beneficiado con el aumento porque cobran regalías y por eso no aparecieron, explicó a LPO un peronista que siguió de cerca la pelea por el tarifazo.
Lo mismo sucedió con los gobernadores. Una fuente al tanto de los pormenores del impacto del tarifazo en el sistema peronista, explicó a LPO: “Todo el bloque de gobernadores de la Patagonia, menos La Pampa, y varios del Norte, se benefician con el aumento del gas por las regalías que reciben, así que difícil vengan aquí a cuestionarlo”.
Pero tampoco se presentó, por segundo día, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, el único que según el Gobierno iba a defender el tarifazo. El viernes había argumentado que no pudo viajar por el paro de Aerolíneas, pero este sábado ya no había paro y tampoco apareció.
También llamó la atención la ausencia de los líderes de las CTA, Pablo Micheli y Hugo Yasky, que se habían anotada para exponer.
Como sea, el fin de semana parece haber pegado duro en la voluntad de quienes arengaban a resistir el tarifazo. El salón estuvo prácticamente vacío –no más de 30 personas siguieron los discursos- durante toda la jornada, que el ministro de Energía, Juan José Aranguren, siguió desde el estrado con evidentes muestras de cansancio.
