El Gobierno dio marcha atrás con la suba de retenciones a 18 economías regionales, luego que productores de la zona núcleo amenazaran con retomar las asambleas y cortes de ruta. El secretario de Bioeconomía, Ferando Vilella, anunció que finalmente no pagarán retenciones lechería, olivos, arroz, cueros bovinos, frutas (excluido limón), porotos, papa, ajo, garbanzo, arveja, lenteja, miel, azúcar, yerba mate, té, equinos y lana, entre otros.
Uno de los perdedores fueron los productores vitivinícolas que pasarás del 0% a pagar el 8% de las retenciones, pese al intenso lobby que desplegó el gobernador radical de Mendoza, Alfredo Cornejo, para eliminarlas.
Además también subirán las retenciones a los subproductos de soja que pasarán del 31% al 33% para compensar el costo fiscal de la medida.
La medida se tomó un día antes de la reunión de Milei con los gobernadores, que traían este tema al tope de su agenda de reclamos. Además, los bloques aliados del Gobierno habían avisado a la Casa Rosada que el impuesto generalizado del 15% a todas las producciones regionales no pasaría por el Congreso, como reveló LPO.
"Celebramos que el diálogo con las nuevas autoridades económicas sea productivo, remarcando, como lo hicimos en la reunión de hoy, que las retenciones no son el camino que hay que recorrer", afirmó el titular de la Sociedad Rural, Nicolás Pinto, tras la reunión con Vilella. La Mesa de Enlace intentó adjudicarse la marcha atrás del gobierno, ante la moelstia de las bases que la acusaron de ser demasiado contemplativa con los nuevos funcionarios.
Pero más allá de las declaraciones amigables, entre los productores la medida resulta insuficiente para diluir el descontento. La confirmación del impuestazo anticipada en exclusiva por LPO, terminó de colmar la paciencia de los productores. "Por ahora es más de lo mismo, seguimos con kirchnerismo de buenos modales", afirmó a LPO un importante productor del sector.
Uno de los perdedores fueron los productores vitivinícolas que pasarás del 0% a pagar el 8% de las retenciones, pese al intenso lobby que desplegó el gobernador radical de Mendoza, Alfredo Cornejo, para eliminarlas.
La semana pasada cuando los funcionarios de Economía que conduce Luis Caputo les comunicaron a los representantes de la Mesa de Enlace la decisión de incrementar a un 15% las retenciones a las exportaciones de todos los productos del complejo agropecuario fue evidente que el secretario del área, Fernando Vilella, estaba pintado. De hecho, Vilella se enteró de la decisión por los medios y varios de sus funcionarios amenazaron con renunciar esa misma noche, tal como reveló LPO. Ahora el funcionario recuperó aire.
El proyecto del ministro Caputo de imponer una tasa uniforme del 15 por ciento de retenciones a todas las economías regionales, empezó a morir así entre la presión cruzada de los productores, los gobernadores y los diputados.
"No es la misma situación la que atraviesan la lechería de la zona núcleo, la fruta del alto valle de Río Negro o el maní de Córdoba, vamos a establecer tasas diferenciales según la situación de cada cultivo", advirtió a LPO un diputado que integra uno de los bloques aliados de Milei. Finalmente eso es lo que anunció Vilella.
La corrección por parte del secretario de Bioeconomía a una medida anunciada publicamente por Caputo expone la debilidad de la gestión en áreas claves como el sector exportador y deja heridos peligrosos. Habrá que ver el vuelto de la fallida ofensiva de Cornejo para que producción vitivinícola quedara exceptuada de las retenciones.