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El fiscal de Paraná, Francisco RamÃrez Montrull, habÃa iniciado el jueves pasado una investigación de oficio contra el titular de Obras Sanitarias de la provincia, Hugo Righelato, por delitos de corrupción en el organismo, a partir de una investigación de Análisis.
El sitio digital de la revista publica hoy que tanto Righelato como otros funcionarios y empleados serán investigados por negocios incompatibles con la función pública, como asà también peculado de servicios y de bienes, por la utilización de personal y maquinarias de Obras Sanitarias de Entre RÃos, como asà también por el supuesto delito ecológico por el uso de material inadecuado en las diferentes obras encaradas en ciudades de la provincia. No se descarta que Righelato también sea comprendido por el delito de enriquecimiento ilÃcito, en función de su notable evolución patrimonial de estos últimos diez años, pese a que siempre fue funcionario público.
Ayer se supo que el alto funcionario habÃa ordenado el vaciamiento de uno de los galpones ubicados en Aldea Brasilera, donde funciona la empresa de uno de sus amigos y por ende la justicia inició una pesquisa para seguir los pasos, según lo dispuso el fiscal Ignacio Arambery.
Anoche, cerca de las 00 hs, personal policial que lo estaba investigando, observó que intentaba salir con su vehÃculo particular, desde una de sus viviendas, en calle Fraternidad, con cuantiosa documentación pública y fue detenido por orden del juez de GarantÃas y Ejecución, Eduardo Ruhl.
Righelato solamente dijo que era documentación que trasladaba hasta el estudio jurÃdico de su abogado pero igual fue detenido y derivado a sla AlcaidÃa de Tribunales, donde pasó la noche  y serÃa indagado hoy. En las primeras horas de este miércoles, el gobernador Gustavo Bordet firmó el decreto de relevo inmediato del cargo.
El titular de Obras Sanitarias de la provincia, Hugo Righelato, hace ya varias gestiones que se encuentra en el cargo y nadie lo ha podido remover. En los últimos años instaló un sistema de negocios con empresas de amigos, que siempre son los beneficiados y que el Tribunal de Cuentas nunca pudo detectar, lo que incluso fue confirmado ayer por el propio titular del organismo, Federico Tomas. Esas firmas prácticamente no tienen personal ni maquinaria, por lo cual las obras siempre se hacen con empleados, maquinaria y movilidad a cargo del Estado.
Righelato tiene a varios de sus familiares en OSER y vive en una amplia residencia en la zona del Thompson, mostrando un nivel de vida que no condice con sus ingresos como funcionario público.
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Fuente: Análisis