Según la imputación judicial, el intendente de Paraná “proporcionaba periódicamente los recursos económicos necesarios en favor de Celis para la adquisición y comercialización de cocaína, por intermedio de empleados municipales”, para lo cual contó “con la asistencia y colaboración del concejal Pablo Hernández y la funcionaria policial Griselda Bordeira”, detenidos este lunes. Además, los tres “adquirieron al menos 6 panes de cocaína, para distribuirlos en Paraná y Concordia”.